Hoy para cenar hemos preparado en casa unas pizzas. La idea ha surgido porque el Olentzero les ha traído a Izan y a Leire un disfraz de cocinero a cada uno.

El disfraz de cocinero viene con delantal, gorra, manopla y un rodillo de madera. Y claro es precisamente tener el rodillo de madera el que más nos ha animado para hacer la pizza.

La receta de la pizza es muy sencilla, y por lo tanto ideal para hacerla con niños.

Los ingredientes necesarios para la masa para 2 pizzas medianas son:
– Agua: 150 ml
– Aceite de oliva: 10 ml
– Sal: 5 gr
– Azúcar: 5 gr
– Harina 300 gr
– Levadura de panadería seca: 6 gr

Para que fuese más sencilla la receta, hemos usado harina con levadura ya incorporada. La venden en cualquier supermercado y son especiales para hacer la masa de la pizza.

Les ponemos a nuestros hijos el disfraz (delantal y gorro de cocinero) y comenzamos: primero mezclamos la harina con la sal y el azúcar en un recipiente grande. Hacemos un volcán en el centro y añadimos el agua templada y el aceite de oliva.

Removemos bien hasta que quede una masa lisa que se desprenda de las paredes del recipiente. Después vamos amasando para que la masa quede elástica y suba bien.

Aunque hasta ahora han podido participar nuestros hijos, esta es la parte donde más van a disfrutar, es decir, estirando la masa con el rodillo que venía con el disfraz de cocinero.

Dividimos la masa en dos porciones y comenzamos a estirar la masa con rodillo sobre la mesa, hasta que quede fina, de unos 3 o 4 mm. de grosor.

La forma que le podemos dar a la pizza es variada: desde la clásica redonda (nos podemos ayudar de la tapa de una cazuela) o cuadrada, o sin forma, es decir, al estirar la masa nos quedamos con la forma que salga.

Sobre la masa de la pizza ya podemos añadir los ingredientes que deseemos: tomate, queso, bacón, jamon york, chorizo, salchichas, etc. Evidentemente cada uno podrá echar aquello que más le guste.

Finalmente, precalentamos el horno a 220º C, y cuando esté caliente introducimos la pizza durante 20 minutos.

Cuando esté lista ya podemos disfrutar de un plato que hemos preparado juntos

Una recomendación: la harina mancha mucho, así que hay que tomarse las cosas con paciencia. Si hemos decidido hacer la pizza con nuestros hijos debemos ser conscientes de que en algún momento mancharemos, y por tanto no perder los nervios. Ya sabíamos que iba a ocurrir antes de empezar.