Cuando un bebe entra en nuestra vida sabemos que se van a producir un montón de cambios a nuestro alrededor: hacemos cosas nuevas y tenemos que dejar a un lado costumbres que hasta ese momento parecía imposible deshacernos de ellas. A medida que nuestro peque va creciendo y nos vamos encontrando con nuevos retos, acumulamos muchas experiencias que seguro compartimos con alguna amiga que acaba de encontrase en una situación similar a la que nosotros hemos vivido. Los consejos de madres amigas nos han salvado en más de una ocasión en situaciones tan comunes cuando se tiene un hijo como pasarte calentando un biberón, arañazos de juguetes en el suelo de madera, no conseguir lavarle bien en la bañera….

Así que es lo que os proponemos: contarnos todos esos pequeños trucos que en alguna ocasión hemos puesto en práctica y no nos han ido del todo mal. Y vamos a comenzar aportando alguno de los que hemos probado en casa.

Enfriar el biberón
Un biberón demasiado caliente es un problema. Lo normal es colocarlo bajo el chorro del grifo un par de minutos hasta alcanzar la temperatura deseada. Una solución más práctica (no te exige estar pegada al grifo todo el tiempo) y más ecológica (por el ahorro evidente de agua) es poner en una cazuela agua con unos cuantos cubitos de hielo. En un par de minutos… ¡listo!

Suelos sin ralladuras
Muy común. Les encanta arrastrar por toda la casa juguetes, mesitas, sillitas…. Si alguna de estas cosas tiene patas, prueba a colocarle calcetines que ya no uséis. Infalible.

Pegamento
Durante una sesión de creatividad usando pegamento, solemos tener pegamento en los dedos. El aceite de oliva y un poco de frote, nos ayudará a eliminarlo.

Lapicero en los muebles
Les hemos dejado unas pinturillas y unos lápices… y papel. Pero ellos prefieren expandirse por la mesa de madera, la puerta del armario… Para eliminarlo son geniales las toallitas húmedas del culete… ¡qué tendrán que lo dejan impecable!

Personalizar la ropa
Ahora que está tan de moda dar un toque personal a la ropa podemos conseguirlo de una manera muy sencilla y económica. Guarda todos los botones “extras” que vienen en la ropa cuando la compras y cóselas en esa ropa básica que venden en tantos sitios. Diferente y original.

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